Tanto si eres un amante del baloncesto como si no, da igual: si tú también fuiste capaz de articular sonidos y palabras de completo significado en los años 90, seguro que te habrás topado con lo que se ha convertido en un culto de toda una generación: Atasco espacial. Atasco espacial es una película de 1996 que ve al protagonista indiscutible, único e inimitable Michael Jordan quien, acompañado por una banda de personajes destartalados pero adorables, los Looney Tunes, se encuentra salvando la galaxia de un equipo de feroces monstruos, los monstruos. En su momento la película fue un gran éxito y estuvo acompañada de un videojuego de dudosa calidad centrado en el juego del baloncesto. Después de 25 años, llega a los cines la secuela de Space Jam, Space Jam: nuevas leyendas y, como en todos aquellos casos en los que se supone un fuerte ingreso comercial, se pensó bien en exprimir la gallina de los huevos de oro y estrenar un videojuego. ¿Podrá este título satisfacer nuestro paladar de jugadores exigentes pero de buen corazón cuando se trata de resurgimientos nostálgicos? ¡Averigüémoslo juntos!
Premisa importante: Space Jam: un nuevo legado, nació como un proyecto para publicitar y dar mayor protagonismo al estreno de la película en salas de cine. De hecho, el juego nació de un concurso entre desarrolladores, ganado por Digital Eclipse, que parece ser tanto su editor como su desarrollador. Space Jam: un nuevo legado es un juego de lucha de desplazamiento horizontal, un género que ha visto una plétora de representantes de gran valor durante la década de los 90 y que, recientemente, ha encontrado nueva vida con pequeñas perlas del calibre de Calle de la ira 4.
Sale Jordan, entra LeBron
El nuevo capítulo de la serie Space Jam no ve a Michael Jordan como protagonista, esta vez la estrella sí lo será Lebron James. El gran LeBron obviamente no estará solo. Para apoyarlo encontraremos personajes queridos para nosotros, incluidos los icónicos. lola conejito Y Bugs Bunny. El objetivo del jugador, como ya se anticipó, será abrirse camino a través de los niveles repletos de enemigos. La idea del juego, por simple que fuera, podría haber tenido éxito si se hubiera apoyado en una adecuada dirección técnica artística, pero no fue así. La primera brecha, y quizás la más obvia, se refiere a la inteligencia artificial, que es demasiado baja y bordea el retraso mental. Derribar enemigos, incluidos los jefes de final de nivel, será una tarea simple y sin recompensa. Completarás toda la aventura en muy poco tiempo, solo te llevará media hora, quizás un poco más, llegar a los créditos finales.
¿Qué pasa amigo?
La jugabilidad es, como es tradición en este tipo de juegos, reducida al mínimo. Un botón está dedicado a los disparos básicos, otro a los saltos y patadas voladoras y, por último, uno al movimiento especial que daña a los enemigos y se usará en caso de que estés rodeado, consciente de que este disparo disminuirá la barra vital. También hay cartas especiales para llamar a otros al campo de batalla. Looney Tunes quienes ofrecerán su apoyo, tanto en el combate como en la recuperación de la salud. Es una estructura de juego que, aunque sencilla, no está dotada de atractivo alguno. Un título que, visto a través de los ojos de un jugador de los 90, también podría funcionar, pero que tras partidas del calibre de Calle de la ira 4, tiende a perder interés real. El juego continúa con una constante repetitividad de fondo, tanto en lo que se refiere al concepto de los enemigos, como a la jugabilidad. este sentimiento de vacío cósmico luego es amplificado por el estilo gráfico. El pixel art utilizado es poco inspirado, mal cuidado y choca, incluso aquí, con exponentes de mucho más nivel. Las animaciones, los personajes y todo el sistema gráfico no goza del debido cuidado y, en conjunto, no es satisfactorio. Lo que nos lleva a dar la suficiencia a este título es, en cambio, el modo multijugador. Space Jam: New Legends, de hecho, permite que tres jugadores salgan a la pista al mismo tiempo. Imaginemos que un producto de este tipo puede usarse para dar momentos de alegría, tal vez mientras espera que llegue la pizza ordenada, o justo antes de que comience el juego. En definitiva, un título de hit and run para disfrutar solo para pasar el rato.
En conclusión ...
El carisma de no es suficiente lebronni la del mítico Bugs Bunny, para revivir un título que, en los locales, podría haber sido mucho mejor. La implementación técnica es realmente demasiado básica, al igual que la jugabilidad, que es repetitiva y aburrida. Hay que decir, sin embargo, que los propietarios de Pase de juego definitivo podrá jugar el título en vista previa y gratis y por lo tanto, como dicen, "Un caballo regalado, no se mira a la boca".
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